Pérez-Llorca es una firma española que ha sabido crecer y diversificarse en los últimos años. A lo largo de esta entrevista, Constanza Vergara, directora corporativa de la firma, desgrana las claves de éxito de una entidad que ha logrado encontrar su hueco en el siempre difícil y competitivo mercado legal. “Los abogados deben sentir y saber que tienen todos los medios a su alcance para desarrollar su carrera profesional en el Despacho, y que cuentan con un sistema de evaluación continua que les permita saber sus puntos fuertes y débiles. La carrera a socio/a en el Despacho ha sido hasta ahora relativamente rápida, y nos gustaría que continuara de esta manera, premiando el esfuerzo, la dedicación y la profesionalidad de nuestros abogados. ”explica. El despacho cuenta con un cualificado equipo de profesionales especializados en las diversas áreas del derecho de empresa. Además socios y abogados del Despacho están recomendados como mejores expertos de sus áreas de especialización, entre otras, las siguientes publicaciones: Chambers Client Report, Chambers and Partners Global, European Legal 500, PLC Which Lawyer?, IFLR 1000, Euromoney Expert Guides, Who’s Who Legal.

Constanza Vergara se incorporó a Pérez-Llorca en 1997 como abogada de M&A durante 8 años. Desde hace 4 años lleva la Dirección Corporativa del Despacho, siendo responsable de áreas como Recursos Humanos, Imagen Corporativa, Comunicación y Prensa Nacional e Internacional y Relaciones Públicas del Despacho.

Nuestra interlocutora cuenta con experiencia como ponente en conferencias y profesora en centros, entre otros, la Universidad Pontificia de Comillas (ICADE), la Fundación Carolina y el Centro Universitario Villanueva. Constanza es actualmente profesora de “Negotiation” en el Instituto de Empresa.

Sobre su formación resaltar que es Licenciada en Derecho. Letrada Asesora de Empresas (E-1). Universidad Pontificia de Comillas, ICADE, Madrid. y Master en Master en Asesoría Jurídica, “DESS Juriste d’Affaires”, por la Universidad René Descartes, Paris V, París. Además es desde el 2008-09 AMP - Advanced Management Program Madrid del Instituto de Empresa (IE), Madrid.

¿Podría hacernos una valoración de este primer cuatrimestre del año para su firma y cómo está afrontando la crisis económica?

Este primer cuatrimestre del año comenzó complicado para todos, pero en tiempos de crisis, lo importante es saber adaptarse. Ciertas áreas han visto incrementar su volumen de trabajo, y por ello hemos dado prioridad a la incorporación o reubicación de abogados en equipos como el de Litigación y Arbitraje o Administrativo, por ejemplo, para afrontar el cambio del mercado. Al ser un despacho multidisciplinar, estamos pudiendo dar respuesta a las nuevas necesidades y exigencias de los clientes.

En un momento como el actual, donde las empresas reducen el llamado gasto legal, pese a su importancia, ¿cómo trabaja su bufete esta situación? ¿Están abiertos a nuevos nichos de mercado?

Enlazando con la pregunta anterior, el mercado ha cambiado sustancialmente. Nosotros hemos tenido un descenso de actividad en algunas áreas, pero hemos aumentado mucho en otras como Litigios, Reestructuraciones, Concursal, Sectores Regulados, etcétera.

También hemos apostado hace relativamente poco por un área nueva, como el Penal Económico, y pensamos que no nos hemos equivocado. Por supuesto, estamos analizando constantemente el mercado y estaríamos abiertos a nuevos nichos, si fuera necesario, dentro de nuestras especialidades.

Pérez-Llorca ha estado en un proceso de transformación a un despacho de gran tamaño. ¿Cómo están gestionando esta situación?

Efectivamente, en estos últimos años, hemos pasado a convertirnos en un Despacho de tamaño mediano, según los estándares del mercado español. Pese a la crisis, pensamos que es importante continuar de forma progresiva en nuestro proyecto de crecimiento, basando nuestro sistema de reclutamiento en seleccionar sobre todo a abogados junior. La intención es que comiencen formándose con nosotros en esta primera etapa de su carrera y, cuando vuelvan tiempos mejores, puedan desplegar todo su potencial con lo aprendido en sus primeros años de ejercicio en nuestra Firma. Tenemos que estar preparados para ofrecer siempre la misma calidad de asesoramiento al cliente.

Su firma se autodenomina despacho independiente. ¿Cuesta mucho mantener este status, en un sector que se está reorganizando? ¿De qué forma está afectando al sector legal la recesión que vivimos?

Fieles a nuestro proyecto inicial, somos un despacho independiente y queremos seguir siéndolo. Esto no impide mantener nuestra vocación internacional a través de la colaboración con algunos de los mejores despachos de los principales países de Europa y América. Esta colaboración se materializa no sólo mediante los propios asuntos, sino también a través de nuestros programas de formación internacional y de Secondments de nuestros abogados.

¿Cuál es la trayectoria y la formación de un profesional de su firma a lo largo de los años? ¿En cuanto tiempo se hacen socios? ¿Cuál es el porcentaje de socios por promoción interna en su despacho?

En el plan de carrera apostamos por la formación de nuestros abogados desde el principio. Cuando los abogados junior se incorporan a nuestro equipo, disfrutan de nuestro Programa de Formación Interna TESEO, durante los dos primeros años. Según evoluciona su carrera en el Despacho adecuamos la oferta de cursos externos a las necesidades formativas de los abogados, con el fin de que sean profesionales completos y actualizados.

Nuestro tamaño también nos permite formar a los abogados en su trabajo diario. Desde el primer momento se involucran de forma plena en los asuntos, siempre llevados de la mano de abogados senior y socios, con los que hay plena comunicación.

Los abogados deben sentir y saber que tienen todos los medios a su alcance para desarrollar su carrera profesional en el Despacho, y que cuentan con un sistema de evaluación continua que les permita saber sus puntos fuertes y débiles. La carrera a socio/a en el Despacho ha sido hasta ahora relativamente rápida, y nos gustaría que continuara de esta manera, premiando el esfuerzo, la dedicación y la profesionalidad de nuestros abogados.

Su despacho tiene un acreditado grupo de profesionales dedicados al arbitraje, ¿Qué tipo de disputa afrontan ahora en este tiempo de recesión? ¿Por qué cree que no han cuajado hasta la fecha las soluciones extrajudiciales?

Efectivamente, nuestro Despacho cuenta con un sólido departamento que participa en arbitrajes, tanto en la condición de árbitros, como abogados de parte. Seguimos trabajando en disputas comerciales entre grandes empresas de un alto valor económico, si bien podríamos decir, que la crisis está haciendo aflorar casos más sofisticados. Si con soluciones extrajudiciales entendemos, entre otros, el arbitraje, creemos que las empresas la consideran como una opción más de resolución de sus controversias. Respecto de la mediación, es una práctica que está poco consolidada en nuestro país hasta el momento, y quizá se deba simplemente a una cuestión cultural.

Según datos de organizaciones como Scevola, aún el abogado no tiene el reconocimiento social que merece. ¿Qué es lo que falla entonces?

Entiendo que, como en todas las profesiones, tenemos muchos aspectos que mejorar. Así, desde la propia formación inicial del abogado, se están realizando reformas en este sentido – como la nueva Ley de Acceso - y creo que cada vez más, todos somos conscientes de lo importante que es instruir en materia de ética y deontología profesional desde las propias universidades.

Siempre se habla que la abogacía es una profesión dura, vocacional. ¿Cómo desarrolla su despacho la política de conciliación de la vida laboral y personal?

Pensamos que es posible conciliar la vida profesional y familiar de los abogados y hacer carrera en un despacho de élite, pero por supuesto influye el tiempo que se le quiera dedicar a la familia. Nosotros consideramos que se puede y se debe facilitar la conciliación. Creemos también que hay que apoyar a las abogadas en el desarrollo de su carrera y no obstaculizar su ascenso si se lo merecen, no por discriminación positiva, sino por convicción.

En su acogida, recordamos siempre a nuestros abogados que la abogacía es una profesión que requiere vocación y dedicación similar a otras profesiones como la del arquitecto o médico.

¿Cuál cree que debe ser el papel de la comunicación en una firma legal? ¿Cómo desarrolla Pérez-Llorca su marketing jurídico?

Como abogados nos debemos a nuestras normas deontológicas y tenemos ciertas limitaciones y particularidades frente a otros sectores. Los clientes nos agradecen la confidencialidad, por ello no es tan frecuente publicitar nuestro trabajo y asesoramiento.

Esto no impide, sin embargo, que todos los años se desarrollen planes de marketing, y de hecho, la situación actual lo requiere cada vez más. La comunicación y el marketing se llevan a cabo de muchas maneras, en la prensa, en las universidades, en los rankings, pero sobre todo con el trabajo bien hecho. La referencia de los propios clientes es muchas veces el mejor marketing.

Es evidente que en los tiempos que corren el abogado debe tener dotes comerciales. ¿Cómo cree que se le da esa formación al profesional del derecho?

Hemos comprobado gratamente, que los nuevos abogados que se incorporan a la Firma vienen cada vez mejor formados en habilidades no jurídicas (lo que los anglosajones denominan soft skills). Efectivamente, hoy en día los abogados deben tener dotes comerciales, o por lo menos conocerlas.

En nuestro caso detectamos este tipo de necesidades en la práctica profesional, e intentamos cubrir las posibles carencias con nuestro programa de formación interna TESEO, y con cursos externos, como por ejemplo sesiones de Coaching sobre Marketing.

Sí es cierto que es preferible fomentar que aquellos que tengan mayor habilidad y soltura en este campo, ya sea de forma natural o con el aprendizaje, estén más involucrados en las actividades de marketing. Dicho esto, todos podemos aportar algo en este campo.

Por último, dénos sus ideas de cara a la modernización de nuestra Justicia.

Acaba de entrar en vigor a principios de mayo una ambiciosa reforma de la Administración de la Justicia, que pretende modernizar y agilizar la tramitación de los procesos. Está por ver su efecto práctico, pero sus objetivos parecen encaminados a modernizar.

Publicado en: diariojuridico.com