Un continente en huelga
La huelga general española es la primera que enfrenta el gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero.
Unas 56.000 personas, según la policía, y más de 100.000, conforme a los sindicatos, desfilaron al son de las ‘vuvuzelas’ y con petardos en Bruselas, sede de las instituciones de la Unión Europea (UE), para decir “no a la austeridad”.
Pese a que no se constató ningún incidente durante la jornada, la policía detuvo a 218 personas con carácter preventivo, esencialmente, manifestantes en posesión de objetos peligrosos.
Los participantes procedían esencialmente de Bélgica y Francia, pero también de Alemania, Polonia y Eslovaquia.
Frente a la explosión de los déficits públicos derivada de la crisis económica mundial, la mayoría de gobiernos emprendieron planes de ajuste, con reformas sensibles socialmente que afectan por ejemplo los planes de pensiones o los sueldos de los funcionarios.
La euromanifestación en Bruselas coincidió con la primera huelga general contra el gobierno español de Zapatero y sus planes de ajuste, que prevén una reforma del mercado laboral que facilita los despidos, un recorte del sueldo de los funcionarios o el aumento de la edad de jubilación.
Uno de los dos principales sindicatos españoles, la UGT, aseguró que la huelga fue secundada por más del 70% de los trabajadores, es decir, más de 10 millones de personas. Pero el gobierno se felicitó de la “absoluta normalidad” que marcó la actividad económica del país.
Enfrentamientos entre la policía y militantes en Barcelona se saldaron con un vehículo de la policía incendiado y 23 detenciones.
Varios miles de personas se manifestaron igualmente en Polonia, 4.000 en Serbia, un millar en Letonia, y unos centenares en La Haya, Atenas y Chipre.
En Francia, donde el gobierno presentó ayer un presupuesto draconiano para 2011 que prevé una reducción del gasto público, los sindicatos llamaron a una nueva manifestación el sábado contra una reforma impopular de las pensiones.
Publicado en: diariojuridico.com